Tras las constantes precipitaciones en el Caribe colombiano, el gobierno local brinda ayuda humanitaria a las comunidades damnificadas, el Ejército Nacional acompaña las labores.
Por: Sinahi Páez Bent
La Gobernación del Atlántico, a través de la Subsecretaría de Prevención y Atención de Desastres, atiendió a las familias afectadas por las lluvias en los municipios.
Por el desbordamiento de una represa y el arroyo grande, 929 familias resultaron afectadas en Palmar de Varela, Atlántico, incluidos 160 campesinos del corregimiento de Burrusco, que perdieron sus cultivos de pancoger (maíz, yuca, plátano, entre otros), en este municipio se han entregado mil sacos y 100 colchonetas.
Por otra parte, en Baranoa, Atlántico, se desbordó un arroyo que inundó 250 casas. Al parecer, el afluente estaba sedimentado por basuras. Un total de 180 familias resultaron con pérdidas en sus viviendas, de las cuales 12 quedaron inhabitables, por tal motivo, estas 12 familias fueron trasladadas a un albergue temporal.
15 sectores o barrios de la población los que registraron emergencias: 11 de Noviembre, Villa Leyla, Circunvalar-11 de Mayo, Fundace, Santa Elena, Calle 26 entre carreras 14 y 5, Loma Fresca, Oasis, 7 de Octubre, Villa Clara, Torcoroma y Barahona.
Por su parte, la Subsecretaría de Prevención y Atención de Desastres avanza en el censo para identificar la totalidad de afectados.
Además, la administración departamental también ejecutó la entrega de ayudas humanitarias a aproximadamente más de 100 familias del municipio de Ponedera y el corregimiento de Puerto Giraldo, Atlántico, afectadas por la ola invernal.
“Son 78 familias de la cabecera municipal más 40 de Puerto Giraldo”, informó la alcaldesa de Ponedera, Diana Martínez.
Los afectados recibieron mercados, colchonetas, láminas de eternit y caballetes.
La alcaldesa destacó el apoyo de la gobernadora, Elsa Noguera, y la Subsecretaría de Prevención y Atención de Desastres.