Por: El Ámbito
La grave situación de salud del senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay, tras el atentado sufrido el pasado sábado en Bogotá, ha llevado al Gobierno Nacional a reforzar drásticamente su esquema de seguridad y el de su núcleo familiar.
Este lunes, las Fuerzas Militares anunciaron que tropas del Ejército Nacional asumirán la protección directa de los familiares del senador, así como del entorno clínico donde se encuentra recluido, en la UCI de la Fundación Santa Fe. La medida se adoptó tras una solicitud urgente realizada por los propios familiares de Uribe, profundamente preocupados por su integridad y por el posible alcance de las amenazas.
El atentado, perpetrado por un menor de 14 años en plena vía pública durante un evento político en Fontibón, no solo ha estremecido al país, sino que ha encendido las alertas al más alto nivel del Estado. La gravedad del caso obligó a movilizar unidades militares para garantizar un cerco de seguridad más sólido y disuasivo.
La Fundación Santa Fe emitió un nuevo parte médico en la mañana de este lunes, en el que confirmó que el estado de salud del senador sigue siendo “crítico” y de “máxima gravedad”. Según el comunicado, el paciente “ha tenido escasa respuesta a los procedimientos médicos realizados”, por lo que el pronóstico permanece reservado.
Este atentado no solo ha golpeado el escenario político, sino que ha reabierto el debate sobre el uso de menores por estructuras criminales, la fragilidad de la seguridad electoral y el clima de polarización que marca la actual campaña presidencial.